Pninei Halajá

08 – ¿Cuándo se pueden reparar utensilios descompuestos?

Hay utensilios que desde un inicio tienen todas sus juntas firmes, empero, a veces con el correr del tiempo éstas se aflojan. En caso de que las personas estén acostumbradas a emplearlos con las junturas flojas – no hay prohibición de ensamblarlos o desarmarlos. Esto se debe a que como ya se han habituado a usarlos de esa manera, no se teme que vayan a reforzarlos  con clavos o pegamento y por lo tanto no está prohibido ensamblarlos. Como vimos anteriormente, ensamblar o conectar un utensilio de manera débil no se considera «construir» (ver Ramá 308:16, Shulján Aruj 313:6).

Por lo tanto, si se salió una ruedita de una cuna, en caso de que se acostumbre a devolverla a su sitio sin ajustarla esto está permitido. Otro tanto ocurre con las gomas que se colocan bajo las patas de sillas o mesas, si su conexión es floja y se salen – se las puede devolver a su sitio. Asimismo, si a una muñeca se le sale una pierna, si la juntura es fuerte no se la puede devolver a su sitio pero si la juntura es débil – está permitido.

Si los brazos de los lentes se caen, no se permite devolverlos a su sitio mediante atornillado, ya que esta juntura se suele ajustar fuertemente. Tampoco se puede devolver el brazo de manera floja por temor a que por olvido se lo ajuste – y se trasgreda así la prohibición de la Torá. En caso de que se pierda el tornillo ya no se teme que la persona ajuste el brazo del armazón, por lo que se lo puede devolver a su sitio mediante un alfiler de gancho o similar por cuanto que se trata de una conexión floja (Shulján Shelomó 314:11:2).

En el caso del lente que se desprende del armazón, si para devolverlo a su sitio es necesario emplear un tornillo que puede ser ajustado fuertemente, no se permite devolverlo flojamente no sea que por descuido se atornille fuertemente. Empero, en caso de que no exista tornillo alguno en el lugar, sino que el armazón se dilató lo cual a veces provoca la caída del lente, se le puede devolver. En este caso no se teme que la persona repare el lente de modo permanente puesto que para ello se requiere de la intervención de un profesional (Menujat Ahavá III 23:35, Orjot Shabat 8:49-50).

En el caso de una cucharita, cuchillo o brazo de armazón de lentes que se doblaron levemente, no se los puede enderezar con la mano porque se trata de la labor de «dar el toque final» (Maguén Abraham 340:11, Mishná Berurá 509 incisos 1 y 7).

No se considera «construir» a la acción de estirar el resorte de un autito de juguete para que se mueva, a condición de que esto no provoque el encendido de luces o active ruidos (Shmirat Shabat Kehiljatá 16:14).

Se permite inflar un colchón, una almohada o una rueda de goma si ya fueron inflados alguna vez en el pasado. Dado que está permitido inflarlos se lo puede hacer del modo habitual, esto es, mediante un inflador manual. Empero, se prohíbe inflarlos por primera vez  pues en opinión de muchos juristas el primer inflado los transforma en utensilios. Se prohíbe inflar un globo aunque sea por segunda vez, no sea que se lo ate. Empero, se permite si se trata de un globo que tiene tapón de cierre y no se lo debe atar y además ya fue inflado en el pasado (Shmirat Shabat Kehiljatá 15:89, 16:7, 34:24).

Libros de Pninei Halajá a precios especiales

Índice de halajot en el capítulo

Índice de capítulos

Conjunto de libros Peninei Halajá en español /11 volúmenes
Ordenar ahora
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.