{"id":1145,"date":"2016-10-20T00:02:44","date_gmt":"2016-10-19T21:02:44","guid":{"rendered":"https:\/\/ph.yhb.org.il\/es\/?p=1145"},"modified":"2016-11-30T15:59:50","modified_gmt":"2016-11-30T13:59:50","slug":"02-20-02","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/ph.yhb.org.il\/es\/02-20-02\/","title":{"rendered":"02. La intenci\u00f3n meditativa de Israel."},"content":{"rendered":"
Cuando los cohanim bendicen a la congregaci\u00f3n, cada uno de los miembros de la misma debe ponerse de pie ante estos y concentrarse en el contenido de la bendici\u00f3n, sin mirarlos ni a ellos ni a ninguna otra cosa que pueda distraerlos (Shulj\u00e1n Aruj<\/em> 128:23, Mishn\u00e1 Berur\u00e1<\/em> 89).<\/p>\n Nuestros sabios dispusieron que un cohen que padece de un defecto f\u00edsico que pueda llamar la atenci\u00f3n, que no suba a la tarima a bendecir para no provocar distracci\u00f3n entre los orantes.<\/p>\n En tiempos pasados en que los cohanim no se cubr\u00edan con su manto de oraci\u00f3n a la hora de bendecir, aquellos que padec\u00edan de manchas cut\u00e1neas llamativas o dedos malformados no sub\u00edan a la tarima. Empero hoy d\u00eda que los cohanim acostumbran a cubrirse con el talit<\/em> a la hora de recitar la bendici\u00f3n sacerdotal, defectos en el rostro o las manos no impiden hacerlo. Sin embargo, incluso hoy d\u00eda si un cohen padece de un defecto importante en una de sus piernas\u00a0 no habr\u00e1 de subir al estrado a bendecir para evitar distraer al p\u00fablico. Si se trata de un miembro fijo de esa comunidad por lo que su defecto ya no causa extra\u00f1eza o curiosidad, podr\u00e1 subir a bendecir pues no habr\u00e1 de distraer a nadie (Shulj\u00e1n Aruj<\/em> 128:30-31).<\/p>\n Asimismo, quien posee un acento extra\u00f1o y por ejemplo, confunde las pronunciaciones de \u00abAlef<\/em>\u00bb y \u00abAin<\/em>\u00ab, no habr\u00e1 de bendecir pues distraer\u00eda a los orantes.<\/p>\n Empero en el caso de quien habla con un acento com\u00fan, aunque no pronuncie adecuadamente las letras \u00abJet<\/em>\u00bb o \u00abAin<\/em>\u00ab, dado que su forma de hablar es compartida por el resto de las personas, no distrae a quien lo escucha. Lo mismo ocurre con todos los acentos conocidos, el ashkenaz\u00ed, yemenita y dem\u00e1s, los cuales por ser comunes no distraen al escucha. Solamente quien realmente se confunde o deforma las palabras m\u00e1s de lo razonable o tartamudea mucho, no habr\u00e1 de subir a la tarima a bendecir (Shulj\u00e1n Aruj<\/em> 128:33, Mishn\u00e1 Berur\u00e1<\/em> all\u00ed).<\/p>\n De estas reglas aprendemos que quienes escuchan la bendici\u00f3n sacerdotal deben estar concentrados, ya que los sabios dispusieron que cualquier cohen que posea alguna caracter\u00edstica personal que pueda distraer a los orantes no debe subir a bendecir.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Cuando los cohanim bendicen a la congregaci\u00f3n, cada uno de los miembros de la misma debe ponerse de pie ante estos y concentrarse en el contenido de la bendici\u00f3n, sin mirarlos ni a ellos ni a ninguna otra cosa que pueda distraerlos (Shulj\u00e1n Aruj 128:23, Mishn\u00e1 Berur\u00e1 89). Nuestros sabios dispusieron que un cohen que […]<\/p>\n","protected":false},"author":9,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[56],"tags":[],"class_list":["post-1145","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-02-20"],"yoast_head":"\n