Tal como ya vimos (cap. 1 inciso 8) el Shabat tiene dos preceptos centrales que lo constituyen, \u00abRecordar\u00e1s\u00bb y \u00abGuardar\u00e1s\u00bb. En virtud del cumplimiento del precepto de \u00abGuardar\u00e1s\u00bb nos abstenemos de realizar toda labor, y de esa forma se genera un espacio vac\u00edo en el alma, el cual se nos orden\u00f3 llenar con el contenido positivo del precepto de \u00abRecordar\u00e1s\u00bb, que implica recordar la santidad del Shabat para de esa manera conectarse a los fundamentos de la fe. Durante los seis d\u00edas h\u00e1biles actuamos en el mundo exterior, mientras que en Shabat retornamos a nuestro \u00e1mbito interior, a nuestra alma, y de esa manera retornamos a los fundamentos de la fe.
\nEl primer elemento que recordamos en el Kidush es la creaci\u00f3n del mundo y el segundo la salida de Egipto. Hay personas que admiten que HaShem cre\u00f3 el mundo, mas niegan la idea de que tras la obra creadora siga vivificando constantemente a Su obra. En la salida de Egipto se manifest\u00f3 claramente la providencia de HaShem, y se supo que el Eterno se revela en el mundo mediante Su pueblo Israel, siendo este el significado del segundo elemento recordado en el Kidush.
\nEstos dos elementos presentes en el Kidush aparecen en las dos versiones del precepto del Shabat en los Diez Mandamientos. En la porci\u00f3n de \u00abItr\u00f3\u00bb aparece el precepto de \u00abRecordar\u00e1s\u00bb el cual enfatiza la idea de la creaci\u00f3n del mundo, tal como est\u00e1 escrito (Shemot 20:8, 20:11): \u00abTe acordar\u00e1s del Shabat para santificarlo\u2026 porque en seis d\u00edas hizo el Eterno el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos; por eso bendijo el Shabat y lo santific\u00f3\u00bb. En la segunda versi\u00f3n que aparece en la porci\u00f3n de \u00abVaetjan\u00e1n\u00bb, el precepto que figura es el de \u00abCuidar\u00e1s\u00bb y all\u00ed se menciona el elemento de la salida de Egipto, tal como est\u00e1 escrito (Devarim 5:12; 5:15): \u00abGuardar\u00e1s el Shabat para santificarlo\u2026 acu\u00e9rdate que fuiste siervo en la tierra de Egipto y que el Eterno tu Dios te sac\u00f3 de all\u00ed con mano poderosa y brazo extendido. Por consiguiente el Eterno tu Dios te ordena que guardes el d\u00eda del Shabat\u00bb. Aqu\u00ed vemos que existe relaci\u00f3n entre el cuidado del Shabat y la salida de Egipto, en ambos se manifiesta el alma de origen Divino, y de esa manera somos liberados de la servidumbre de Egipto y de la servidumbre al trabajo.
\nLa esencia del precepto \u00abRecordar\u00e1s\u00bb se cumple mediante el recitado del Kidush y de esta manera se extiende sobre todo el Shabat, tal como est\u00e1 escrito (Shemot 20:8): \u00abTe acordar\u00e1s del Shabat para santificarlo\u00bb. Esto se refiere a que todo el Shabat sea santificado para recordar en \u00e9l los fundamentos de la fe y estudiar Tor\u00e1, conjuntamente con el placer de las comidas sabrosas y el descanso reparador. Tambi\u00e9n en los otros d\u00edas de semana es preceptivo recordar al Shabat y santificarlo, esto es, honrarlo m\u00e1s que a todos los dem\u00e1s d\u00edas y prepararse para ir a su encuentro mediante la preparaci\u00f3n de platillos deliciosos, una especial higiene corporal, el lavado de ropa y el ordenar la casa (ver Ramb\u00e1n a Shemot 20:7, arriba cap. 2 incisos 1-6).
\nEl precepto del Shabat es igualmente obligatorio para hombres y mujeres. Si bien la regla general indica que las mujeres est\u00e1n exentas de los preceptos positivos marcados por el tiempo y \u00abRecordar\u00e1s\u00bb entra en esa categor\u00eda; sin embargo las mujeres est\u00e1n preceptuadas de recordar el Shabat ya que sus dos fundamentos que son \u00abRecordar\u00e1s\u00bb y \u00abGuardar\u00e1s\u00bb fueron dichos en una misma expresi\u00f3n (dibur ejad) y est\u00e1n inseparablemente entrelazados. Por lo tanto, as\u00ed como las mujeres deben cumplir con el precepto \u00abGuardar\u00e1s\u00bb que es de \u00edndole restrictivo, deben tambi\u00e9n cumplir con \u00abRecordar\u00e1s\u00bb a pesar de ser de corte positivo y temporal.
\nVemos as\u00ed que la obligaci\u00f3n de la mujer en este precepto equivale a la del hombre por lo que al recitar el Kidush puede hacer cumplir a este con el precepto. Empero un ni\u00f1o o ni\u00f1a menores de la edad requerida para el cumplimiento de los preceptos no pueden recitar el Kidush para adultos, ya que en el caso de ni\u00f1os, a\u00fan cuando entiendan cabalmente la idea del Shabat, su obligaci\u00f3n es \u00fanicamente rab\u00ednica, por lo que no pueden hacer cumplir con su recitado a quien tiene obligaci\u00f3n por la Tor\u00e1 (Shulj\u00e1n Aruj 271:2).<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
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