{"id":5532,"date":"2018-04-07T00:02:14","date_gmt":"2018-04-06T21:02:14","guid":{"rendered":"https:\/\/ph.yhb.org.il\/es\/?p=5532"},"modified":"2025-05-18T11:53:03","modified_gmt":"2025-05-18T08:53:03","slug":"17-07-02","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/ph.yhb.org.il\/es\/17-07-02\/","title":{"rendered":"02- \u00bfC\u00f3mo se cumplen las cuatro partes del precepto?"},"content":{"rendered":"

Es precepto de la Tor\u00e1 separar ofrendas y diezmos seg\u00fan su orden (Ramb\u00e1m Hiljot Terumot 3:23).<\/p>\n

1) En primer lugar, se debe separar la gran ofrenda<\/strong> (terum\u00e1 guedol\u00e1<\/em>) para el cohen, y tal como le fue dicho a Aharon (Bamidbar-N\u00fameros 18:12): \u00abToda grosura de aceite y todo lo mejor del mosto y del cereal, sus primicias, lo que ofrezcan ante HaShem, para ti te los he dado\u00bb<\/em>. De acuerdo con la Tor\u00e1 la terum\u00e1 guedol\u00e1 no tiene una medida especificada y cada uno est\u00e1 en su derecho de contribuir lo que guste, y quien aportase una sola espiga de trigo de todo un granero habr\u00e1 cumplido con el precepto. Sin embargo, nuestros sabios establecieron una cantidad y fijaron que una persona com\u00fan debe separar un cincuentavo de sus frutos (2%), mientras que las mezquinas (ba’alei ayin ra’\u00e1<\/em> o ‘los poseedores de un mirar sesgado’) separan un sesentavo (1.67%), al tiempo que las generosas (ba’alei ayin tov\u00e1<\/em> o los de mirar benevolente) un cuarentavo (2.5%). Es preceptivo separar la ‘terum\u00e1 guedol\u00e1’ de manera estimativa (‘a ojo’ – baomed<\/em>) para que as\u00ed la voluntad del coraz\u00f3n pueda manifestarse, y por ello, incluso despu\u00e9s de que los sabios establecieron el porcentaje, ordenaron separarlo a ojo, sin pesarlo, medirlo o contar los frutos (Talmud Jerosolimitano Tratado de Terumot 1:4, de acuerdo con Bamidbar-N\u00fameros 18:27).<\/p>\n

2) El ‘primer diezmo’<\/strong> (ma’aser rishon<\/em>): Luego, se separa una d\u00e9cima parte de los frutos restantes para el lev\u00ed, tal como fue dicho (Bamidbar-N\u00fameros 18:21): \u00abY a los hijos de Lev\u00ed Yo he dado todo diezmo de Israel por heredad, a cambio de su servicio, ya que ellos prestan servicio en la Tienda de Reuni\u00f3n\u00bb<\/em>.<\/p>\n

3) La ‘ofrenda del diezmo<\/strong>‘ (terumat ma’aser<\/em>): Del diezmo que se entrega al lev\u00ed, este debe a su vez separar un diezmo que es la d\u00e9cima parte de la d\u00e9cima parte, y entreg\u00e1rselo al cohen. Tal como fue dicho (\u00eddem 26-28): \u00abPero a los levi\u00edm habr\u00e1s de hablar y les dir\u00e1s: Cuando tom\u00e9is de los hijos de Israel el diezmo que os he otorgado a vosotros de ellos, para vuestra posesi\u00f3n, habr\u00e9is de separar de \u00e9l la ofrenda de HaShem, un diezmo del diezmo\u2026la ofrenda de HaShem, a Aharon el cohen\u00bb<\/em>. Tras separarse la ofrenda del diezmo, sol\u00edan quedar en manos del lev\u00ed un 9% del total de los frutos, al tiempo que el cohen, que recib\u00eda dos ofrendas, se quedaba con aproximadamente un 3%.<\/p>\n

4) Tras la separaci\u00f3n del primer diezmo (ma’aser rishon<\/em>) se separa otro diezmo de los frutos remanentes. En los a\u00f1os 1,2,4 y 5 del ciclo sab\u00e1tico se lo denomina ‘segundo diezmo’ (ma’aser shen\u00ed<\/em>), queda en manos del propietario de la producci\u00f3n y es \u00e9l quien deber\u00e1 traer los frutos a Jerusal\u00e9m para comerlos all\u00ed en estado de pureza. En los a\u00f1os 3 y 6 este diezmo se denomina ‘diezmo del pobre’ (ma’aser an\u00ed<\/em>) y es entregado a las personas necesitadas.<\/p>\n

La correcta estructura de la naci\u00f3n de Israel, cuyas bases se encuentran afianzadas en la tierra y su cabezal asciende a las alturas celestiales, se apoya en gran medida en el precepto de las ofrendas y los diezmos, el cual genera un estrecho v\u00ednculo entre el mundo real y el mundo espiritual, entre quienes se ocupan de las labores agr\u00edcolas y quienes se dedican a la educaci\u00f3n. Gracias a las ofrendas y a los diezmos que los productores separaban de sus cosechas, los cohanim y los levi\u00edm pod\u00edan dedicarse a las labores espirituales, y de ese modo tanto los dadores como los beneficiarios se volv\u00edan socios en el mantenimiento de una vida plena de significado.<\/p>\n

Esto y m\u00e1s, las ofrendas y los diezmos revelan los valores sagrados que se ocultan en los frutos producidos por la tierra de Israel. Por medio de la entrega de ofrendas a los cohanim, se ponen de manifiesto los anhelos por colaborar con las labores sagradas y engrandecer la Tor\u00e1 que anidan en el seno del pueblo de Israel.<\/p>\n

Por medio del ‘primer diezmo’ entregado al lev\u00ed, se revela la aspiraci\u00f3n a colaborar en la labor educativa y en la ense\u00f1anza de la Tor\u00e1. Durante los cuatro a\u00f1os que separamos el segundo diezmo, se revela la aspiraci\u00f3n de cada individuo de nuestra naci\u00f3n por estar conectado por s\u00ed mismo a la santidad por medio del ascenso a Jerusal\u00e9m y la ingesti\u00f3n de los frutos en estado de pureza. Adem\u00e1s, los frutos encierran otra aspiraci\u00f3n oculta, la de ayudar a los m\u00e1s necesitados, la cual se manifiesta a trav\u00e9s de la separaci\u00f3n del diezmo del pobre (como as\u00ed tambi\u00e9n dejar en los campos leket, shijej\u00e1 y pe\u00e1 para los menesterosos). Una vez que todos estos valores se manifiestan, los frutos se tornan aptos y adecuados para su consumo, para que por su intermedio podamos incrementar el vigor y la alegr\u00eda para una vida significativa.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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