03 – Advertencias sanitarias

Nuestros sabios advirtieron que una persona no debería llevarse una moneda a la boca no sea que la hubiese tocado alguien enfermo y en consecuencia resulte contagiada. Además, advirtieron que no se tragase el sudor ni se lo mezclase con los alimentos. Asimismo, advirtieron que una persona no colocase pan bajo sus axilas para que no se le adhiriese sudor (Talmud Jerosolimitano Tratado de Terumot 8:3, Shulján Aruj 116:4-5).

Igualmente, las personas que preparan alimentos deben ser escrupulosas con la higiene de sus manos, especialmente los cocineros que preparan comida para multitudes. Estos deben tener el recaudo de lavarse bien las manos y los dedos con agua y con jabón antes de tener contacto con los alimentos. Cada vez que vayan al excusado, al regresar, deberán lavarse las manos con agua y con jabón. De igual manera, si el cocinero se enfermare de una afección contagiosa, deberá abstenerse de preparar la comida, a fin de no contagiar su enfermedad a los alimentos.

Es preciso tener especial cuidado a la hora de preparar alimentos de origen animal, ya que, en estos, es dable que se presenten más microbios y más infecciones. Por lo tanto, quien procesare carne o pescado previo a su cocción, inmediatamente después de hacerlo deberá lavar sus manos con agua y jabón para desinfectarlas de gérmenes e infecciones, pues la cocción de la carne y del pescado elimina a las bacterias y a las infecciones provocados por estos alimentos, pero no a lo que queda impregnado en las manos de la persona que los tocó antes de cocinarlos. De igual forma, es correcto lavar bien con agua y jabón las superficies sobre las cuales fueron cortados la carne y el pescado crudos, para evitar así la transmisión de microbios a otros alimentos.

Es preciso tener el recaudo de mantener los alimentos en el refrigerador, porque en condiciones de alta temperatura, los gérmenes capaces de provocar una intoxicación se multiplican. Cuando se retira del refrigerador un platillo o un guiso líquido y se desea calentarlo, es preciso cuidar de que efectivamente hierva para matar así a los gérmenes que pudieran generarse durante el calentamiento. Y por sobre todo, es preciso tener el recaudo de guardar en el refrigerador los alimentos de origen animal que no fueron cocidos, por ejemplo, aquellos que, como la mayonesa, contienen huevos crudos y en los cuales pudieran desarrollarse microbios peligrosos tales como la Salmonela y la Escherichia coli.

Asimismo, es preciso tener cuidado de no dejar un cuchillo de una manera y en un lugar tales que pudiera poner en peligro a las demás personas. Por ejemplo, no se debe clavar un cuchillo en una fruta, no sea cosa que luego venga alguien que pase por alto la presencia del cuchillo y al apoyarse en esta o caer sobre ella resulte herido (Talmud Jerosolimitano Tratado de Terumot 8:3, Rambám Hiljot Rotzeaj 12:6, Shulján Aruj 116:5).

Índice de halajot en el capítulo

Índice de capítulos

Conjunto de libros Peninei Halajá en español /11 volúmenes
Ordenar ahora