De cara a la boda, la novia debe aprender los fundamentos del precepto de la alegría de la unión marital (simjat oná) y las leyes de la pureza familiar, y es bueno que lo haga recurriendo a la asistencia de las guías o asesoras para novias (madrijot kalot).
Como en todo ámbito del quehacer, hay asesoras o madrijot mejores y otras menos. Una señal de la virtud de una buena madrijá es que está versada en las halajot y sabe exponerlas bien, a la vez que se explaya en la enseñanza del precepto de la alegría de la unión y explica adecuadamente su valor (tal como se explica en Pninei Halajá – La alegría del hogar y su bendición caps. 1-3). Y a partir de ello, continúa aclarando a la novia las leyes de pureza e impureza que están destinadas a orientar, enaltecer y potenciar el amor y la alegría conyugal. Por el contrario, una asesora menos exitosa, invierte el orden de los factores, y no basa su asesoría en el quid del precepto que es alcanzar la unión completa ni tampoco explica las halajot con nitidez.
En la actualidad la gran mayoría de las novias acostumbran a recurrir al uso de píldoras hormonales con el fin de regular la fecha del último período menstrual previo al casamiento, de modo que este tenga lugar un momento que le permita a la novia purificarse antes del enlace, y a la vez que ello ocurra al menos tres semanas antes de la boda. De ese modo, ni bien la novia se impurifique por el sangrado de la pérdida de la virginidad y suspenda el uso de píldoras, el siguiente período menstrual llegue poco después, de manera que el lapso de impureza se acorte.
Conviene saber que existen diferentes tipos de píldoras y cada una de estas es buena para la mayoría de las mujeres y afecta negativamente a una minoría, provocándoles pequeños sangrados o malos estados de ánimo. Por lo tanto, la novia debe asesorarse con una doctora que conozca del tema con suficiente antelación, de modo tal que alcance a tomar las píldoras en cuestión durante dos períodos menstruales previos al casamiento, para que, en caso que viera que no le sientan bien, la doctora pueda modificarle el tipo de pastillas o su dosis, y así la novia llegue a su enlace tranquila y pura.