Las mujeres están exentas del tzitzit pues se trata de un precepto positivo marcado por el tiempo, ya que el deber rige durante el día y no durante la noche (Talmud Bailonio Tratado de Menajot 43(A), Shulján Aruj Oraj Jaím 17:2, arriba 2:7).
Aquella mujer que quiera vestir un talit puede hacerlo en privado. Según la usanza ashkenazí habrá de recitar la bendición correspondiente y según la sefaradí no habrá de recitarla.