Surgió una duda respecto de un caso en el cual un alimento prohibido cae en uno permitido y luego se vio anulado, y posteriormente, en este alimento permitido cae un nuevo componente prohibido, y el permitido posee un volumen suficiente como para anularlo, pero si se suma al primer componente prohibido que anteriormente se anulara, no hay en lo permitido lo suficiente como para anular a ambos.
Según la regla de “kamá kamá batel” (“lo primero, lo primero anulado”), el primer componente prohibido se anuló y ya no puede sumarse al segundo, ya que, si hubo conocimiento o conciencia entre la caída del primer componente prohibido y el segundo, estos no se habrán de sumar. Esto es así ya que cuando ello fue sabido, el componente permitido superaba al prohibido y lo anuló, por lo que este ya no podrá sumarse a otro elemento prohibido que pudiera caer más adelante. Por otra parte, según la norma de “vuelve a despertarse” (jozer veni’or), el primer componente prohibido vuelve a despertarse y a sumarse al segundo que cayó ahora a la mezcla, y en caso de que no haya alimento permitido en una cantidad suficiente como para anular a los dos componentes juntos, la totalidad de la mezcla se tornará prohibida.
En caso de que la sumatoria de los componentes saborice (notén ta’am), hay consenso en la Halajá en cuanto a que la mezcla estará prohibida. Por ejemplo, si cayó un poco de leche sobre la carne y se anuló en sesenta, y luego cayó más leche sobre la misma olla de carne, si el sabor de la leche resulta perceptible en la carne, la mezcla estará prohibida, dado que la leche que cayó en un inicio se suma a la que cayó posteriormente y tornan a la mezcla en prohibida.
Sin embargo, en un caso en el que se mezclan dos componentes de la misma especie (min beminó), y por ende, el sabor del alimento prohibido no es perceptible en el conjunto, los juristas debatieron cómo corresponde proceder. En la práctica, mientras que no haya en los componentes no kasher cantidad suficiente como para tornar la mezcla en prohibida por la Torá, se aplicará el principio de “kamá, kamá batel”. Empero cuando la sumatoria de los componentes prohibidos genera una prohibición según la Torá, el componente permitido ya no puede anular al prohibido que se mezcló en él y todo lo que anteriormente se había anulado vuelve a despertarse (jozer veni’or) por lo que la mezcla se tornará prohibida (Pri Jadash 99:21, Gaón de Vilna 11).
Por ejemplo, si una sopa de carne no kasher cayó dentro de una sopa de carne kasher, según la Torá mientras que la kasher sea mayoritaria, la mezcla lo será. No obstante, nuestros sabios decretaron que la mezcla será kasher solamente si el componente permitido es sesenta veces mayor que el prohibido (ver arriba halajá 2). Entonces, si la sopa kasher era sesenta veces más abundante que la taref, la mezcla será kasher. Y si nuevamente cayere allí un componente no kasher en una cantidad menor a una sesentava parte, se anulará en sesenta, y así una vez tras otra siempre que haya conocimiento entre cada caída.
Esto y más, el componente taref que fuera anulado en primera instancia se sumará al permitido, de modo tal que si cayere por segunda vez sopa taref, y solamente contando al taref que resultó anulado previamente hubiere en la sopa sesenta veces el volumen necesario respecto al taref nuevo, la mezcla será kasher. No obstante, si la situación ha de llegar a que en la práctica la mitad de la sopa sea taref, todos los componentes prohibidos volverán a sumarse entre sí y por lo tanto, la mezcla se prohibirá.