Pninei Halajá

1 – El decreto de los sabios respecto al lugar del encendido.

Nuestros sabios dijeron que: «Las velas de Januca deben ser colocadas del lado exterior de la entrada de la casa. Quien vive en un piso alto que las coloque en la ventana que da al dominio público y en caso de peligro es suficiente que las coloque sobre la mesa» (Tratado de Shabat 21(B)).

En el pasado, la mayoría de las personas vivían en planta baja con una puerta que daba o a la vía pública o a un patio amurallado con un portón que daba a la calle. Los sabios dispusieron que se encendieran las velas en la entrada que daba a la calle, para así publicitar el milagro. Además, dispusieron que se colocasen las velas a la izquierda de la entrada para que quien entre se vea rodeado de preceptos, la «mezuzá» del lado derecho y las velas del lado izquierdo (Tratado de Shabat 22(A)).

A priori, las velas deben colocarse a una altura del suelo que va de los tres a los diez palmos (de 24 a 80 cm.) ya que si se colocan más alto, quienes las ven, pueden pensar que fueron encendidas como faroles para iluminar la entrada a la casa. Por otra parte si las velas se colocan a la altura del suelo, parece como que alguien las dejó allí por unos minutos, para luego llevarlas a que iluminen en otra parte. En cambio, si se colocan a una altura que va de los tres a los diez palmos, queda claro que están allí para cumplir con el precepto de publicitar el milagro. De todas maneras, a posteriori, si se las encendió por debajo de los tres palmos o por encima de los diez igualmente se cumplió con el precepto. Si se encendieron las velas a una gran altura, por encima de los veinte codos (9.6 mts.), no se cumplió con el precepto, pues las personas no acostumbran a mirar tan alto (Tratado de Shabat 21(B), Shulján Aruj Oraj Jaím 671:6).

En el caso de las personas que viven en un piso más alto que la planta baja, si encienden su “janukiá” en la puerta de entrada de abajo que está sobre la calle, no se distinguiría que se trata de sus velas y por eso los sabios les indicaron que enciendan junto a sus ventanas.

En épocas de peligro, en las que se teme que los gentiles puedan agredir a los judíos, los sabios dispusieron que se enciendan las velas dentro de la casa sobre la mesa y así se publicita el milagro para los integrantes del hogar.

Libros de Pninei Halajá a precios especiales

Índice de halajot en el capítulo

Índice de capítulos

Conjunto de libros Peninei Halajá en español /11 volúmenes
Ordenar ahora
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.